domingo, 8 de junio de 2014

Quién sabe dónde te aguarda la muerte



Quién sabe dónde te aguarda la muerte, el traidor destino que siempre ataca por sorpresa. Aunque a la salida del sol se decida la contienda, nunca sabrás qué luz del día cegará tus ojos y tu mirada. No hay año que no sea su destinatario, no hay semana sin ese día donde la hora y sus segundos estén marcados. Despidiéndose las agujas del burlón reloj, como manos firmes y menudas, que te dicen adiós mientras se aleja, dejándote callado, grosero, maleducado, descortés, sin responderle.
Te vendrá libre como pájaro en el patio, como mariposa entrando por la ventana al mediodía y la oscuridad inundará los espacios de tu casa. Tu boca se llenará de sequía mientras tu cuerpo nutra la tierra con su abono.
Y llegarán lágrimas y olvido, y quedará vacío y silencio.